La Mirada Que Bloquea...

Juliana (nombre ficticio) es una ejecutiva con una prometedora carrera comercial; a pesar de su amplia experiencia en el campo comercial, su llega a la compañía que contrató mis servicios no fue bien recibida por uno de sus pares, quien en lo que parecía ser un acto de protección de territorio, decidió hacerle la guerra haciéndola quedar mal ante su equipo, sus compañeros y su propio jefe. La acusaba de incompetente y de tomar malas decisiones... Juliana entraba cada vez más en crisis y conflicto con su compañero y el clima en la oficina se puso tan pesado que hasta corría el riesgo de perder su cargo; sin embargo ella no quería rendirse; sabía que podía superarlo pero encontraba cómo lograrlo. Luego de tres sesiones orientadas a desbloquear el cerebro de Juliana en lo referente a su relación con su compañero, pudo darse cuenta que lo que la tenía bloqueada era la mirada que su compañero tenía cuando la enfrentaba... a su cerebro le recordaba la mirada que tenía uno de sus padres cuando no la dejaban tomar decisiones por si misma y eso la hacía sentirse insegura para tomar decisiones y avanzar; mediante la observación de los malestares asociados a esta situación, Juliana fue capaz de neutralizar y procesar lo que desde su niñez no había resolver, y esto le permitió comenzar a tomar mejores decisiones con mayor facilidad. Hacia la cuarta sesión, Juliana llegó con un tema para trabajar totalmente distinto al que veníamos tratando y cuando le pregunté cómo iba el tema en la oficina me respondió sonriendo: " ya no me importa.. lo veo más como un familiar y ya no me molesta... lo raro es que él también cambió conmigo y ahora me respeta". Un par de meses después hice una llamada de seguimiento a Juliana para saber cómo estaba y me respondió que todo iba de maravilla y el clima laboral había retornado a la normalidad.

Una de las cosas que más me gusta hacer es apoyar a seres humanos y a organizaciones a tener un mejor y más sano clima laboral.